Ya denunciada por Colegios de Martilleros y Corredores, la red inmobiliaria de franquicia fundada en 1973 en Estados Unidos continúa dejando quejas de parte de propietarios de viviendas y futuros compradores.
Envueltos en las acusación por ejercicio ilegal de la actividad denunciada por el CUCIABA aduciendo que "La mayoría de los 'agentes Remax' son monotributistas que no tienen título profesional y pagan a la franquicia por ocupar un espacio laboral” ahora las denuncias llegan desde los mismos clientes.
La publicidad engañosa parece ser el talón de aquiles de la franquicia, que abre y cierra oficinas sistemáticamente en la Argentina.

Varias denuncias relatan que se publican propiedades a valores inexactos, a fin de acceder a la formalización de la reserva, y cuando esto ocurre presentan el verdadero valor (mas caro por supuesto) fingiendo confusión.
”Me interesé por una casa publicada en 67 mil dólares, y cuando empecé las tratativas con los agentes de Remax ante mi interés de señarlo, me dicen que se confundieron y que subió a u$s 85000” expreso a nuestro medio una denunciante indignada ante la situación vivida en City Bell.

Otro damnificado relato que cuando vio un departamento en el centro de la ciudad de La Plata, en este caso de U$S 35.000. Allí comentó que al no ser de la capital de la provincia sino de Salta, vino a cerrar la operación y se encontró con un costo total de U$S 55.000. “Me dijeron que el propietario lo subió! una barbaridad!” .
Se suman las denuncias con cierres muy poco claros en las operaciones de la empresa del globo, que parece pinchado.




